Creo que voy a ser de los últimos en escribir sobre el AOS2011. Aunque participé en el podcast que tan oportunamente grabó Carlos Blé el mismo día que volvimos de Pamplona, creo que el momento merece una reflexión por escrito. No voy a hacer una revisión de lo que ocurrió porque revisando los blogs y las fotos que se han publicado creo que es más que suficiente para hacerse una idea de lo que fue. Y si no te haces una idea, es que tienes que ir al siguiente. 🙂
Al grano. Este año ha sido un año de consolidación del movimiento agilista en España. Está claro que ya hay mucha gente que ha cambiado de mentalidad o que ya la había cambiado mucho antes pero ahora simplemente ha encontrado una manera formal de explicar lo que ya hacía. Ya no estamos la mayoría explorando y haciéndonos las mismas preguntas los unos a los otros. Ahora, muchos ya tenemos respuestas porque hemos andado el camino, y hemos cometido muchos errores, es decir, hemos aprendido mucho. Aún somos unos bebés en esto, nos queda (como comunidad) mucho por explorar, pero lo hacemos muy rápido y pronto estaremos en condiciones para explicarles a todos que somos más competitivos siendo ágiles y, sobre todo, profesionales. ¿Ocurrirá en la CAS2011? Yo creo que sí. Estoy seguro de que sí.
Este año ha habido algunas charlas cuyo contenido era claramente no-ágil. No quiero decir que se hablara de cómo hacer informes en colores con el Microsoft Project, sino de que “Internships”, “Talento” o “Seducir a las empresas” son temas que tienen más que ver con retos que tiene nuestro sector (el del desarrollo de software, si es que eso existe en España). Pero no me parece mal que se traten estos temas, al contrario. Porque esto es algo que ya comenté en la CAS2010: el espíritu de querer mejorar es lo que nos está aglutinando. Todas éstas son oportunidades en las que nos reunimos alrededor de una excusa para hablar “de lo nuestro” y dejar que nuestros sueños comiencen a formar parte de nuestro mundo real, o mejor dicho, que el mundo real comience a sacarnos de ese sueño letárgico en el que llevamos viviendo desde hace tanto tiempo.
Y está también claro que el otro mensaje que di en aquel panel de la CAS2010 sobre el esfuerzo que tenemos que hacer para mejorar nuestras habilidades como programadores también está cuajando. Cada día hay más y más eventos centrados en las habilidades del programador. Katayunos, merendojos, 12meses12katas y todo tipo de actividades que mezclan lo lúdico con lo rigurosamente profesional son demostraciones palpables de que la gente con talento y ganas de aprender (y seguir aprendiendo) están ahí. Sería de falsa modestia negar que desde agilismo.es, tanto Xavi Gost como yo hemos ayudado decisivamente a impulsar esto, pero también sería ingrato no agradecer a todos los que han (habéis) ayudado a que (juntos) estemos cambiando las cosas.
Son tiempos de cambios. Donde ya nada será como era antes. Donde las relaciones jerárquicas cada vez son menos importantes. Donde las lealtades no son a un jefe, a una empresa o ni tan siquiera a un sueldo, sino a una cultura basada en personas. Este cambio, cada uno en la medida de sus posibilidades de influencia, se está produciendo poco a poco, pero como en cualquier buen proyecto ágil, el incremento de valor se produce en cada iteración. En cada entrega hay cada vez más valor. Y eso es con lo que me quedo yo. En cada entrega percibo más y más valor. En cada Agile Open Spain percibo que somos un colectivo más grande, con más conciencia de lo importante que es ser un buen profesional, que cada vez respeta más a sus compañeros, clientes y demás actores implicados en este negocio del desarrollo de software.
Ya hay muchas empresas que se están dando cuenta de que si quieren sobrevivir a los malos tiempos necesitan tener a esta gente que se motiva sola y que, con las armas adecuadas, serán capaces de ayudarles a conquistar las plazas más difíciles. Esta gente ya no habla tanto de SOAP, BPM, el último framework de moda… ni tampoco se dedica a quejarse de lo mal que está todo… lejos de eso empleamos parte de nuestro tiempo libre para mejorar, o para reunirnos con otros y hablar de cómo mejorar. Y, por supuesto, mejoramos. Cada día.
Eso sí. No me confío y sigo poniendo historias en el backlog. No vaya a ser que nos quedemos sin nada que hacer… 🙂
El siguiente paso: me gustaría que fuera demostrar que la economía española necesita de nosotros para remontar el vuelo. Para ello os invito a escuchar esta breve intervención de Xavier Quesada y una puntualización justo a continuación de Jorge Uriarte que he extraído también del video completo del panel de la CAS2010 que, como véis, me ha dado para mucho en este post.
No dejes de soñar, porque en sueños es libre el hombre.
Walt Whitman
NOTA: Por cierto, para los que queráis la letra del poema, aquí la tenéis.